Sabemos que lo que te interesa en este punto es saber si una inversión de
este tipo se justifica en tu negocio. Aunque suene a frase cliché, la compra de
un sistema ERP no es realmente un gasto sino una inversión.
Vamos a hacer números. Por ejemplo, evalúa el costo operativo de una
producción mal planificada:
• Puedes estar gastando dinero en honorarios de personal administrativo sin
la capacidad de dar información en tiempo real.
• Puedes también estar haciendo de manera incorrecta las compras de tu
empresa (caso muy común), sin tener un preciso control de lo que
realmente se necesita.
• Y lo más probable es que estés gastando dinero en software que por
separado manejan diferentes áreas de tu empresa.
En síntesis, una empresa sin un sistema de gestión como el ERP, siempre
pierde dinero en uno u otro sentido. Entonces, es evidente que una inversión
en esta plataforma es totalmente justificable.
¿Cómo se recupera la inversión?
Como ya hemos dicho, un ERP te permite ahorrar costos a través de la
automatización de procesos y centraliza la información, pero además:
• Reduce stock por la realización de planificaciones con cálculo de necesidad
real.
• Planifica los cambios para evitar la acumulación de materiales fuera de uso.
• Cotiza a más proveedores.
• Reduce faltantes y emergencias en las líneas.
• Controla todo el proceso administrativo y lo hace con menos personal.
• Controla totalmente los pagos a terceros.
Y muchas funciones adicionales que optimizarán el presupuesto de tu
empresa al máximo.